En el borde del camino hay una silla
la rapiña merodea aquel lugar
la casaca del amigo está tendida
el amigo no se sienta a descansar
su zapatos de gastados son espejos
que le queman la garganta con el sol
y a través de su cansancio pasa un viejo, que le seca con la sombra, el sudor.


El que tenga una canción tendrá tormenta
el que tenga compañía, soledad.
El que siga un buen camino tendrá sillas
peligrosas que lo inviten a parar.
Pero vale la canción buena tormenta
y la compañía vale soledad, siempre vale la agonía de la prisa, aunque se llene de sillas la verdad
.


1 personas se interesaron en mis idioteces:

Ele. dijo...

Gracias preciosa.
Hablaremos!!
Me voy a dormir. Estoy muy cansada.

Te quierooo!